martes, 30 de agosto de 2016

Juventud, divino tesoro

-¡Cuando yo era joven e iba a algún sitio era cuesta arriba…y cuando volvía también!
Pues si, ya no soy tan joven y sin embargo sigue siendo todo cuenta arriba y yo ya no tengo las fuerzas ni la voluntad de antes para seguir subiendo, siempre subiendo…a veces incluso escalando.
Estoy cansado y en ocasiones desearía, ya no una cuesta abajo, sencillamente un llano que me permita pasear y contemplar el horizonte respirando de manera tranquila y no jadeante, siempre falto de aire y energía, con el siguiente tramo de cuesta como único horizonte.
Quizás es porque fumo…
Más bien creo que me falta el aire porque me falta vida.
La ilusión de vivir se apaga consumida por el huracán de la desidia y la falta de esperanza.
Como dije una vez, la esperanza ha sido asesinada brutalmente por la verdad.
Y así me hallo fingiéndome vivo en publico, muerto andante que ya empieza a oler, a desprender tufillo a degradación moral, mental y emocional pero no físico, que ese aspecto esta muy cuidado, ¡válgame!
Y en lógica reacción los demás tienden a alejarse del mal olor tapándose disgustados la nariz.
No se les puede culpar.
Debería darme una ducha, de esas largas e introspectivas en las que, apoyado contra el embaldosado de la ducha, dejas caer el agua sobre ti en una especie de intento trascendental de arreglar todo lo que esta mal. Quizás, si lo intento suficiente, me acabe colando por el desagüe  y vaya a parar a un mundo donde mi tufo sea solo una mera anécdota disimulada entre los mas insoportables olores.
De una manera u otra lo más probable es que acabe en la cloaca, húmeda, caliente, sofocante y seguramente terriblemente desquiciante, ya sea por dolor, tortura, aburrimiento, soledad o infinito tiempo para pensar.
Un cabezazo o dos a tiempo contra la pared te libran de muchos malos momentos. Y es tarde, habrá que buscar otra solución que bastante me duele ya la cabeza.
A fin de cuentas, creo que necesito perfumar mi alma con el sutil aroma de la redención. Y solo hay un método efectivo de redención cuando estas muerto en vida. Perfecto para agotados, atormentados, sufridos, aburridos, reivindicativos y demás seres, valientes o cobardes, según a quien preguntes, que tienen nada que perder y algo que ganar.

¡Que divertido es jugar a ser mayor!

sábado, 27 de agosto de 2016

El mas triste adios

Sin haberlo expresado
Ni haberlo pronunciado
El más tiste adiós
Se da por sentado

Amarga despedida
De miradas ausentes
El más triste adiós
Del pasado presente

Sin muecas ni gestos
Sin una sonrisa
El más triste adiós
Se aleja deprisa

Con desden e indiferencia
Sin restos de aquel amor
El más triste adiós
Se llena de dolor

Lento pero inexorable
Ya finaliza el encuentro
Al más triste adiós
Le ha llegado el momento

Y sin quererlo, sin desearlo
Pero obligado de antemano
El más triste adiós

Me alegro de haber estado


jueves, 25 de agosto de 2016

Vacio

Déjame solo, déjame
Que en la soledad te encuentre
Déjame, que en soledad te sueñe
Déjame solo, déjame
Si no te puedo tener, déjame
Deja que recuerde en oscuridad
Deja que brille tu recuerdo
Déjame, te lo pido
Abandona mi mente
Deja vació mi interior
Libera mi oprimido corazón
Déjame respirar
Déjame llorar
Deja, que te pueda olvidar
Déjame vació de ti
Déjame seco
Apaga el fuego que arde en mí
Déjame solo, una vez más
Que sienta frió y pesar
Deja que me pueda ahogar
En historias de triste final
Déjame, sin ti
Deja un poquito en ti

Pero déjame, al fin

lunes, 8 de agosto de 2016

Soberbia

Contemplo mi reflejo
Aquel que me devuelve el espejo
Y en mis ojos veo
La muerte del deseo

¡No!
Jamás seré vencido
No hay hombre conocido
Que me haga sucumbir

Yo soy el trueno
Soy la voz de la razón
Soy el último bueno
Que pierde el corazón

A través del cristal agrietado
Que devuelve una imagen deforme
De un recuerdo inmaculado
¡Yo soy el hombre!

Vulgares sombras me pretenden
Tras mi paso indeleble
Me miran y no comprenden
Que soy inalcanzable

Soy la fuerza
Soy el movimiento
Soy aquel que prende almas
Con un feroz sentimiento

No conocéis mi poder
Hasta donde puedo llegar
No soy el de ayer
Ni soy con quien jugar

Me rebelo ante vosotros
Como el monstruo a evitar
Solo sois despojos
Que me estorban al andar

Soy el viento que arrecia
El que deja temblando vuestro mundo
Yo soy soberbia
Y lo afirmo rotundo

Soy la vida y la muerte
¿Te atreves a retarme?
¿Te atreverás a juzgarme?

Vamos, que no tenga que buscarte…