Confieso
que te vi
Y no volví
a pestañear
Confieso
que te olí
Y no volví
a respirar
Confieso
que te toque
Y mi
mano no volvió a notar
Confieso
que te sentí
Y ya no
volví a amar
Hoy
confieso mis pecados
No me
importa, ¿Qué más da?
Si es
un secreto a voces
Que
deseo expulsar
Confieso
que mi mente
Presa
de tu imagen
No
consigue recordar
Y si
acaso, vacilante se atreve
Tu
imagen, un fuego ardiente
Vuelve
para reclamar su derecho
Confieso
que te escribo
Oculto
entre las sombras
Mis
dedos no responden a otra orden
Que la de escribir tus sueños
Confieso
que no duermo, que sueño despierto
Que mis
ojos no se cierran,
Por si
olvido tu cabello
Que tu
eres mi descanso
Y solo
en ti duermo
Y
confieso que no siento, ni padezco
Que
nada me afecta
Que sin
esa sonrisa abierta
Sin tus
labios de canela
El
mundo esta vació, de emociones y sorpresas
Que no
como, que no bebo
Que tus
ojos, si se van
Me
dejan sin alimento
Que tu
boca, si no esta
Me deja
sediento
Y es
mas, yo confieso
Que te
amo desde dentro
Que te
adoro, te idolatro
Que te haría
un monumento
Que
“siempre” es poco
Que
“nunca”…eso es de locos
Y así
me mantengo
Confesando
mis anhelos
Suspendido
en un instante
Esperando
que me abraces
Que me
digas al oído
“yo también
confieso”
No hay comentarios:
Publicar un comentario